domingo, 26 de octubre de 2014

Iniciación al Dungeonslayers

Wilco quemaba las telarañas con aire distraído. No era un experto, pero viendo el tamaño de aquellas hebras, como maromas de barco, prefería no pensar, de momento, qué les aguardaba al fondo de aquella oscura y tenebrosa gruta.

Les había llevado un buen rato decidir qué hacer, si empaquetar el botín y volver por donde habían vuelto para devolverlo y cobrar la recompensa o continuar investigando aquel horrible lugar.

En un principio parecía claro. Illidan y él mismo habían argumentado que ya habían tenido suficiente con aquel duro combate contra ese pequeño ejército de goblins, mientras que Khundo, envalentonado quizás al haberse hecho con aquella preciosa espada, recordaba el carácter aventurero del grupo y que por tanto debían de continuar explorando la caverna. Alassar no entró en el debate y se centró en leer aquellos viejos pergaminos que había encontrado en la cueva del chamán, y Anulf, como siempre, optaba por callar mientras atendía la fea herida que le había hecho perder el conocimiento hace tan sólo un rato.

Mientras recitaba oraciones en su extraño idioma, agarraba su amuleto formado por extrañas plumas y huesos de criaturas desconocidas, y el bárbaro obviamente sabía lo que se hacía, ya que todos comenzaron a sentirse mejor, y Wilco observó con alegre sorpresa que donde antes tenía una costra de sangre y tela, por donde había entrado el virote, a la altura del costado, ahora sólo había una mancha rojiza, sin marca alguna en su piel.

"Quizás podamos echar un vistazo", dijo Wilco haciendo que su voz resonase en el silencio de aquella cueva.
Los demás le observaron, y el feroz enano coreó con un gruñido de satisfacción la invitación del mediano.
No sabían qué les esperaba allá abajo, pero por Nébula que lo iban a descubrir.

¡Volvemos a dar vida al blog! Tras nuestras partidas de la Marca del Este, ahora nos hemos enfrascado a probar Dungeonslayers, un juego de descarga gratuita del alemán Christian Keening con un sistema simple y rápido, un homenaje al rol más clásico.
Por ahora hemos jugado online a través de roll20, conociendo a personas y jugadores en esta nueva aventura.